Apuñados

Apuñados como escasos frijoles
Sintiéndonos los olores
Juntándonos desconocidos
Sintiéndonos los alientos

Esto es a diario
Cada mañana, tarde y noche
Prestándonos al juego cotidiano
nadie protesta, sólo la necesidad

¡Vaya niño, mercado vas!
Colaboremos señores, es de cuatro
Vaya, vaya, vale dos pesos
¡Cuidado! ahí viene la broa

Y seguimos…apuñados
Más bien hacinados
En la carcoma de cada día
En el hambre palpitantes del mediodía.

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