Despiadada ciudad

Madre
¿me darás la mano
para cruzar esta calle
atiborrada de basura
y brisa negra?

las farolas me llaman
con palabras revoloteantes

madre
tu fantasma sonríe a la nada
y me invade la sensación de ser el único responsable
de estas calles oscuras
y no hay un borracho que me eche una mano
un perro que me eche una cola
una muerte que me lleve
de regreso a tu vientre

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